Ésta mañana dos establecimientos educativos de Oberá se vieron en la necesidad de suspender el dictado de clases por distintos problemas con el agua. En la escuela 660 del Barrio Yerbal Viejo, desconocían la falla que los dejó sin el vital líquido «no hay agua en la escuela y no sabemos por que la Celo dice que no hay corte y desde el consorcio afirman lo mismo. Decidimos suspender las clases hasta que determine el orígen del problema», dijo la Directora Gladis Cornelius. Este año se enviaron notas, fotos y filmaciones reclamando a las autoridades que atiendan los problemas edilicios que presentan, «hay mucho por hacer, la escuela tiene 26 años y nunca se hizo una reparación, además hay problemas en los baños y en el techo», remarcó la docente. Por su parte en la escuela 633 del kilómetro 11 el problema es otro, se trataría de una aparente contaminación del agua. «Suspendimos las clses para preservar la salud de los alumnos, ayer ya sentíamos un alor raro y hoy en las ollas donde se prepara el té para el desayuno se formaba una capa espesa como si fura grasa. Fuimos a la planta de agua y tomaron muestras, ahora esperamos saber el resultado de los análisis. Tres alumnos manifestaron que presentaban diarrea y mal estar, por prevención se suspendendieron las clases hasta que se normalice la situación», explicó la Vicedirectora Patricia Hartel.