Rindfleisch reconoció que “los propietarios de algunos kioscos admitieron que se cambiaron ese lugar donde la seccional de PolicÃa es más permisiva. Los controles no son regulares en el lugar, sino esporádicos. No  tenemos herramientas, eventualmente podemos levantar una infracción. Ni siquiera se les puede desalojar del lugar si no interviene la policÃa. Hubo  casos que se encierran en el auto levantan los cristales y allà termina nuestra capacidad operativa, y necesitamos del Juez de Paz y la institución policial”, dijo.
Nocturnidad en Oberá: el Intendente pide un trabajo en conjunto
El Intendente Ewaldo Rindfleisch salió al cruce de las declaraciones del Juez de Paz que pidió publicamente que cada uno se ocupe de la parte que le toca, luego de los  reclamos y el ataque de jóvenes a un vecino de Oberá que soporta este decontrol hace casi diez años. “La idea es realizar un trabajo en conjunto entre el Juzgado de Paz, la PolicÃa y el Municipio porque a nosotros nos preocupa el tema al igual que al Juez de Paz. En la zona se hicieron muchas inspecciones, hicimos actas de infracción,  llegamos casi a la clausura de uno de los locales y trabajamos para controlar los niveles de ruidos. Evidentemente esto no alcanza, pero no comparto el criterio del Juez de Paz de clausurar un espacio publico por 15 o 20 inadaptados, en todo caso tenemos que ver que mecanismos implementar para que eso no ocurra, porque la plazoleta es de todos los obereños”, remarcó el Alcalde.